Las estatuas parlantes de Roma
Las Estatuas Parlantes son, probablemente, la mejor expresión de la romanidad antigua: veraz, satírica, descarada e irreverente, sobre todo hacia el poder y sus ostentaciones.
Ubicadas en diferentes lugares del centro de la Capital, las Estatuas Parlantes nacieron en época pontificia, cuando el pueblo empezó a colgar del cuello de estas esculturas carteles con textos satíricos, invectivas y diálogos humorísticos dirigidos a burlarse de diferentes personajes públicos, entre ellos el Papa, naturalmente de autores anónimos.
Los romanos no tardaron en ponerles nombres a estas estatuas, como Madama Lucrezia, el Facchino, el Abate Luigi, el Babuino, el Marforio y el más famoso, el Pasquino.
¿Lograréis encontrarlas todas?